Matria

Sabes que tomas una buena decisión cuando estás contento con el rumbo que has decidido tomar, pero sobre todo cuando dejas que sea la convicción y la razón los que guíen este proyecto. No se trata de ver quién tiene más poder, de ver quién tiene más ideales o de quién los defiende mejor. Todo es cuestión de saber que por encima de una persona, por encima del interés propio, está el bien común.

Puede que el fuego arrase todo cuanto monte haya plantado en nuestra matria, pero siempre que exista un hombre, mujer o niño que esté dispuesto a empuñar un sacho o una pala para abrir un agujero y plantar un árbol, habrá esperanza. Puede que desde los sillones de la capital sin mar quieran controlar el espíritu libre de un pueblo nacido para vivir de la costa, pero mientras exista un marinero dispuesto a enfrentarse a los mares, habrá esperanza para esta tierra de agua. 

Se puede ser muy orgulloso, tanto que el orgullo te ciegue y no permita ver que por encima del ansia personal, del ansia por el poder y preservar una dinastía, hay cosas que no tienen precio. El servir libre, con el corazón en la mano sin esperar nada a cambio sólo por amar un palmo más de tierra, a su gente y a todo lo que representa, es el mayor de los privilegios que te pueden brindar.


Cuenta con mi espada.


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